Abstracta la noche

-Ahora respira profundo,bien profundo y pensa en algo lindo.Esto duele un poquito nada más-Me dijo

Siempre me dicen lo mismo,que respire y piense en algo lindo como si algo realmente lindo se me pudiera ocurrir ahora.Y ya sé que en realidad no duele un poquito sinó bastante y que no importa porque luego no sentiría nada de nada.
A diferencia de la última vez (que no recuerdo no sé aún por qué) no forcejié.Me quedé quieta,busqué algo lindo en mi memoria y le inventé algunas cosas...y ya adivinarán el resto.La puerta que se cierra,la ventana que se abre y como uno se escapa de manera pícara como si se estuviera safando de algo o robándo algún tesoro,que en realidad no es tesoro alguno pero la excitación que se produce al estar cometiendo alguna inocente canallada exquisitamente grande.

Abrí los ojos y ahi estaba yo boca arriba y atinando a tocarme el vientre con el dedo anular como si estuviera pinchando merengue con un punzón,como si alguna vez hubiera habido algo.Ya no lo había.

Vinieron a revisarme y a contarme cómo había sido.Pregunté si podía verlo,me dijeron que no,insistí mucho y sedieron.Luego de bañarme (el agua se sentía de manera muy peculiar,como si cada gota se llevara mi piel gastada por el drenaje.Realmente me sentía limpiada por el agua,pero me daba miedo que me lastimase) lo pude ver en un frasco.Ahí estaba él.Ahí estaba el maldito que semejante susto y dolor me había causado.El que suponía ser un demonio anónimo en potencia ahora era un pequeñísimo corpúsculo ovoideo negro rojizo inanimado que flotaba en un líquido opaco.

Finalmente las visitas y la desalentadora noticia de pasar una resumida estadía en aquella habitación.No me dieron el por qué,odio que no me den el por qué de las cosas o intenten encondérmelas de mala manera como si fuera idiota.Aún así,la razón nunca apareció y el sueño tampoco.Esas abstractas noches frías escuchando silenciosos lamentos ajenos y un silencio enfermizo interrumpido por más enfermizos ruidos de gente empujando carros y revisando que todo estuviera en orden.Lo estaba,el ciego y mudo orden reinaba y las rebeliones estaban imposibilitadas de realizarse porque la voluntad estaba doblegada y ahogada en un pozo también ciego y mudo.Eramos máquinas y fenómenos fascinantes o hastiantes a la merced de la humana mano de dios.Que me molestara era inútil,después de todo los desórdenes ya habían sido arreglados y a lo funcional,la estructura ya estaba bien,maciza y de pie.Aún así yo quería una ventana y un rayo de sol.

-Blamberose