Interrupción: Las multitudes traen la primavera

Salimos volando por la ventana,pero en realidad caminábamos todos juntos de las manos riendo y disfrutando de lo que pasaba.Hacía mucho que parecíamos no hacer eso,pero nunca es tarde para volver a intentarlo o siquiera recordarlo ¿Qué importaba si era arriesgado y suicida? Eso pasaría a la posteridad opacando a todo lo demás.
El provocaba la aurora boreal en los agonizantes cielos de Buenos Aires.Era imposible...¿lo era? lo estábamos viviendo y disfrutando como si fuera lo último o el gran comienzo de algo.Los colores se mezclaban en aquel escenario olvidado por muchos que brillaba mucho más que en la más perdida de las memorias.No quería despertar.Nosotros llevábamos la primavera,nosotros eramos todo eso que nos fue obligado a sepultar por un miedo egoista que,después de todo,no le era propio a nadie.Era una efermedad que se había apoderado de todo pero todavía nos quedaba poder vencerle aunque sea en los sueños más delirantes e imposibles al son de aquellas auroras danzantes que salían de las manos de un desconocido (de nuestras manos)
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De lejos llega como por arte de magia aparece y le cambia el fondo a la situación actual (la terrible situación de todos los días que me es tan habitual,que me da lo mismo o no me sorprende ni sobresalta).Extraño experimento que se repite todos los años en el mismo período de tiempo del mismo.Quisiera que eso nunca cambiara o durara un poco más.
El sol pega en mi frente,no me deja ver,una brisa veraniega antinatural para los tiempos que corren suspira en mi oido y revolotea con mi pelo transportándome a retazos de pasado más dulces,más agradables,que drenan la humedad cancerígena,que oxida toda mi estructura,aunque sea por una fracción de segundo y eso se siente muy bien,tan bien que todo pareciera retroceder a aquel entonces sin siquiera moverme de donde estoy.Un último aliento,un último haz de luz en brazos del grito final.

-Blamberose